Barrotes
“Il entend la sinistre respiration des rumeurs vagues de la nuit. » Lautreamont
El mundo, una jaula vacía. Estoy al exterior, siento sus barrotes de alambre que me pesan como un susurro en crescendo, me atrinchero. Con las alas del insomnio mi pensamiento sobrevuela nudos de neuronas que crujen pensamientos perdidos en las sombras de su asfalto interior. Te contemplo absorta como a una carcajada fingida. La vida es un espejo de una fiesta que no es tuya.
Con los ojos clavados en la conciencia contemplo este universo donde el pensamiento se esfuma como el calor aturdidor que emana un pozo de petróleo recién descubierto. Lo falso brilla como tu sonrisa arropada por la posesión de un zapato nuevo que te alivia la piel con su alegría fugaz de dos segundos. Sin embargo todos llevamos una máscara con el perfil de la dicha incorporado y anhelamos la jaula dorada para comprar sueños con tarjetas visa o mastercard.
Sigo entre barrotes, perdida en un universo que no alcanzo a comprender, orejas taponeadas por el cerumen del egoísmo. Mi mente se hace un nudo, estoy ahí, presa, desnuda, ante una forma de delirio que cala mi agujero interior y anuncia nuevas grietas. Inhalo aire como un latido que chilla.
Mi angustia es una jaula que me impide dar el próximo paso de un baile. Me miro y me contemplo como a un animal agazapado en su truculento murmullo. Prisionera del apetito voraz de un mundo que se ríe a carcajadas con el aire viciado que lo asfixia. Esta jaula dorada me mira y me contempla como a un espejo. La alegría que no alivia es el sino de un mundo que sangra y pide auxilio.
María Germana Matta – en Madrid, a 26 de febrero de 2011
Me ha gustado mucho encontrarme con tu "Batalla de Papel", gracias al blog "Asamblea de Palabras"
ResponderEliminarUn espacio muy atractivo con entradas dignas de pasear por letras e imágenes.
Un saludo y mi felicitación, María.