Renacer
A veces la sombra de tu sombra te dirige la palabra, retiene tu mirada de lluvia antigua y recompone la memoria de lo andado, alberga sonoros pensamientos que gimen entre las ramas que cobijan tu corazón y con su manto de miel remienda tu destino de barro imperfecto.
La sombra con su murmullo sordo te aconseja, envía un manantial de señales al espejo aturdido de tu alma, libera el átomo de un pensamiento nuevo. Y con el humus que acarrea la primavera siembra manantiales de augurio. Tu sombra se estremece y conmovida vuelve a andar.
María Germaná Matta - En Madrid, a 16 de Febrero de 2011
Wow Maria,
ResponderEliminarHermoso tu poema, transmite mucha frescura y feminidad..
No sabia esta faceta tuya.
Te felicito y sigue adelante.
Ana Nieva
A veces la sombra nos recuerda la existencia de la luz, entonces no aparece como lugar oscuro, sino como bálsamo, como alimento para poder justamente "renacer". Es esa tierra húmeda y fértil en la que todo podría ser posible...
ResponderEliminarUn hermoso, muy hermoso poema, muy femenino, delicado, sutil...
Un enorme abrazo y con un beso
Hilda