Aenne Biermann - París 1926
La loca escapada del
barrio
Las
chicas del barrio no saben volar,
pues las alas les crecen sobre el
pecho,
pequeñas y redondas, alas
de ángel.
Tú
las ves caminar por calles estrechas - unas uretras;
es
la senda que toman los niños para salir de las VPO
Allí,
el macadán transpira como las locomotoras a vapor
a las que saltaba mi abuela,
cuando se fugaba,
aturdida por el high-tech
de los maquinistas.
Ellas
se pasean por calles estrechas
apretando los párpados.
Bajo el tanga deslizan, a
escondidas,
los
atolondrados dedos.
En
los alrededores de los parques acechan los moteros
vestidos con la serie de
números largos.
Ellos
arrancan a las chicas del acuario etéreo de las alamedas
y les muestran el motor a cadena
plateada,
el acceso secuencial, los grandes
asfaltados.
Las
chicas miran por sus telescopios,
suspiran
mecánicamente
y
sus finas caderas cubren poco a poco
los
ardientes jadeos.
La
autopista las coge entonces de la nuca
con sus dientes vaginales
y les lleva hasta el nido de la gran
velocidad,
como
a crías que aún no han abierto los ojos.
Hasta
que la luna gira en el cielo
como una
llanta de Harley Davidson.
Sólo
la noche vuelven las chicas del barrio,
fatigadas.
Sus
ombligos centellean como un intermitente anudado.
Grandes
alas han crecido en sus pechos,
redondas, hasta el vientre.
Los
moteros embragan al partir, las saludan.
La autopista les llama.
Los motores dejan tras de sí
largas volutas de esperma.
Traducción:
Fulgencio López y Manuel Ángel Gómez Angulo
La perra de la noche
No
fijes con los ojos el cielo raso y no jures
con esa voz
enronquecida,
de la que se sirve
la noche para cortar tus axilas! Y
no me recites pizcas
de Cocteau:
El hombre
solo está siempre
en mala compañía!
No
me digas que te quedas encerrado
entre las paredes y que escuchas rap,
maniatado
hasta el vértigo, despierto hasta el desvanecimiento,
como sobre una vía férrea, entre los
tapones,
como en una prisión,
donde los hombres se hunden clavos en
la cabeza.
No
llores en mi oído porque la cuerda esta podrida,
y porque el vodka se te subió,
como el deseo trascendental
de vomitar,
y que su huella de chancro engulle los
vasos.
Yo
conozco tu soledad de marinero,
que voltea la manivela a todo momento.
Escucha
en la puerta todo lo que desees. No volveré.
Espera
entonces en la ventana para sentir,
con sus pasos etéreos,
la perra de la noche enroscarse
alrededor de tu cuello.
Y su lengua morada hundirse
profundamente en tu
boca.
Traducción
Miriam Montoya
De amor y cianuro!
No
me llames a tu casa, en tu mansarda,
girando
- como un atolondrado girando! -
los botones de la estufa,
para deshacerte de una vez por
todas
de los aullidos de viejos lobos del
horno,
de su pelaje mudado,
que te crece sin cesar
sobre los brazos,
la noche, como los
furúnculos, mientras apagas
los cigarrillos profundamente en tu
carne.
No
me llames a tu casa, en tu mansarda,
hendido
- como un atolondrado hendido! -
entre las barras de la cama,
en la puerta, bajo la bota,
tu tibia y tu peroné
- las escucho crujir en mi móvil -
como si hendieras
el viejo fusil de caza de tu padre,
demasiado pegajoso para que puedas
cargarlo de nuevo,
después que se volara la tapa
de los sesos
y, teniendo espasmos, rompió tu
puerta
a patadas.
No
me llames a tu casa, en tu mansarda,
puesto
que iré!
Y me arrancaré el corazón del pecho,
lo cortaré con los dientes
y lo rosearé de sal
extraída con una pica
de mis glándulas lacrimales
y lo arrojaré
como uno arroja una piedra de amolar,
para que parta tu tibia y tu peroné,
- en menudos trozos! -
para que amontone profundamente en el
horno
tu soplo de amoniaco
y para que hienda por siempre
tu cabeza de bestia
salvaje!
Traducción
de Myriam Montoya
Biografía y publicaciones
Nació en Rumania en 1981, reside en París. Poeta y
traductora francófona.
Poesía publicada: El Libro de señas y sombras
(Premio de la Vocación 2004), La Casa en cuchillas de afeitar (Premio
Apollinaire 2007), La Autopista A4 y otros poemas (2009). También ha escrito teatro
y crítica literaria.
En Rumanía, Linda Maria Baros es la fundadora y
organizadora del festival Primavara Poetilor / Le Printemps des Poètes.
En la actualidad, es investigadora a la
Universidad de París-Sorbona, París IV, y prepara una tesis de doctorado.
Fuente:
El Coloquio de los Perros, nº 23, España y Web de Linda María
un descubrimiento para mí! su nombre nunca lo hubiese asociado a nacionalidad rumana ni a escritura en francés!!!
ResponderEliminarLa verdad es que me fascinó...muchas gracias!
Me alegra que te guste. Estaba leyendo poesía contemporánea francesa y me gustó sobre todo por su lenguaje directo y vital. Según lo que he leído vive desde hace tiempo en Francia, quizás por eso escribe en francés. Hay varios casos en la literatura el peruano César Moro, la inglesa de ascendencia egipcia Joyce Mansour, la tunecina Amina Saïd. A mí eso me parece extraño pero muy interesante.
ResponderEliminarUn beso
venir a tu casa es un deleite, una sorpresa continua.
ResponderEliminarabrazos, maría*