Foto de Igor Amelkovich
(sin título)
Para
mi infusión de humildad
recojo
coca recordando mis raíces,
veo
la hora y espero paciente
a
la frente que beso.
De
noche canto y coso
con
mis manos de nieve áspera
los
bolsillos rotos de sus pantalones.
Soy
su concubina intangible
la
niña truncada que limpia sus heridas
y
traga la culpa acumulada de dos milenios,
La
hechicera que comprende sus miradas naranjas.
Podría
demorarme en enumerar
los
papeles que cumplo.
Las
hornillas y la resignación
son
por poco la misma cosa
por
eso no cocino, pero si trapeo
mis
pensamientos perversos.
Soy
práctica y lucida
pero
una gusana sentimental después de todo.
Podría
entender sus raras costumbres
pero
no lo intento. Solo me encargo
de
mantener viva la fogata
donde
calentamos nuestros cuerpos
los
Sábados por la noche.
Y
al compartir el mismo lecho
hasta
las letras las cambio por suspiros.
Conjuro
Miro
al horizonte
sabiendo
ya lo que acontece,
casi
palpando las cenizas fugitivas
que
dejó el fuego de anoche
Respiro
hondo incorporándome
En
el crepúsculo,
presto
a rozar mi cuerpo
nubes
suaves
que
por momentos me cubren
Llega
el momento exacto
en
que mis sentidos agotados
me
abandonan temporalmente
Las
cenizas siguen su camino hacia el limbo
Para
recobrar de nuevo mis sentidos
toco
la noche, caigo en un sueño profundo
y
al despertar,
las
cenizas ya se esfumaron.
Duendes bajo mi colchón
Camisas
a cuadros
y
tu aroma oriental
me
trasladan a
gradas,
ron,
bibliotecas
coloniales
aceras
de cartón,
paraderos
de autobús,
besos
de eterna despedida
lagrimas
tras un monitor.
Romerías
a Hidalgo,
cementerios
de arena
en
mis zapatillas
de
diferente color,
anteojos
difuminan tus ojos
señales
inexpresivas,
y
bajo mi colchón duendes
que
imitan tu voz.
Bigrafía:
Katherine
Geraldine Medina Rondón, nació en Arequipa - Perú en 1994. Estudio artes plásticas en la Escuela
Superior Carlos Baca Flor y en la actualidad estudia Literatura y Lingüística
en la Universidad Nacional de San Agustín.
Fuentes: Urbanotopia y Suicidasub
En cuanto al primero "sin título" me ha recordado a una muchacha que decía : y para qué quiero la libertad si estoy enamorada!
ResponderEliminarEn cuanto al primero "sin título" me ha recordado a una muchacha que decía : y para qué quiero la libertad si estoy enamorada!
ResponderEliminarGracias por hacernos conocer a esta joven poeta.
ResponderEliminarSiempre tan valorable tu trabajo.
Un abrazo.
Me dejó una sensación de inquietud la poesía de Medina Rondón. No la conocía y fue muy grato encontrarme con sus letras.
ResponderEliminarLeí palabras muy femeninas, conmovedoras y a la vez muy fuertes, poderosas.
El primer poema es el que me dejó en estado de asombro, inquietud...Me hubiese gustado poder escribir algo así, con tanta claridad y entrega.
Gracias por compartirla!!! Tu espacio es siempre un lugar de hermosos encuentros.
Mi gran abrazo, amiga entrañable!
Hilda Díaz
Jota Jota, cuando se está enamorado uno entra en otra dimensión, el deseo de estar siempre al lado del amado. Afortunadamente, es un estado transitorio y vivámoslo intensamente mientras dure.
ResponderEliminarUn abrazo
Pilar,
ResponderEliminarGracias a ti por tu presencia en mi espacio.
Un abrazo
Querida Hilda,
ResponderEliminarLa primera vez que la leí, fue precisamente el primer poema y me dejo una sensación de frescura y sus potentes imágenes me cautivaron.
Un abrazo inmenso.