domingo, 30 de septiembre de 2012

Mis poemas: Signos de un naufragio

* Foto de Cannon Bernáldez


Hay hilos que brotan
de los ojos
son húmedos como un flujo
tímido
y se esconden tras el maquillaje
de sus incertidumbres.

Deshilachados
se deslizan buscando
un corazón
para desvelar sus cicatrices
con palabras mudas
y zurcir sus harapos
de flores amarillas
mirarse
en los labios húmedos del alba
pero la ciudad es un escaparate
amurallado de ofertas
que ralentiza los impulsos.

Blindamos nuestro instinto
con paracetamol y zapatos puntiagudos.

Sin embargo,
deambulamos de aquí para allá
añorando el hechizo salvaje
de un jardín desordenado y tierno
pero cuando el día despelleja nuestros cuerpos
untamos crema protectora
para el alivio de la arruga
en la sonrisa.

Crecemos y nos apiñamos
en ciudades de plástico.

El tiempo despliega
sus alas de murciélago
y emprende su vuelo circular
devorándonos.

Floto desorientada y ámbar
en el líquido amniótico
útero del universo.

Mis poemas: María Germaná Matta
Safe Creative #1209302421240

viernes, 28 de septiembre de 2012

René Char, poesía

*Martin Stranka - El universo suspendido



Yo habito un dolor
no dejes el cuidado de gobernar tu corazón a esas ternuras pariente del otoño
de las que prestan su placida apariencia y su afable agonía.
El ojo es precoz a la arruga.
El sufrimiento conoce pocas palabras.
Prefieres acostarte sin cargas, soñarás con el mañana y tu cama te será ligera.
Soñarás que tu casa no tiene cristales.
Estas impaciente por unirte al viento, al viento que transita un año en una noche.
Otros cantarán la incorporación melodiosa, las carnes personifican sólo la brujería del reloj de arena.
Condenarás la gratitud que se repite. Más tarde, te identificarán con alguien inmenso
disgregado, señor de lo imposible.
Sin embargo.
No habrás hecho más que aumentar el peso de tu noche.
Regresaste a la pesca de murallas, a la canícula sin verano.
Estás furioso con tu amor en una armonía que pierde la cabeza.
Sueña con la casa perfecta a la que nunca podrás ascender.
¿Para cuándo la cosecha del abismo?
Pero tú has quebrado los ojos del león
tú que crees ver pasar la belleza por encima de las lavandas negras…
¿Quién te ha alzado una vez más, un poco más alto, sin convencerte?
No hay sitio puro.
Pulverizado el poema.

René Char – versión María Germaná Matta

J'habite une douleur
Ne laisse pas le soin de gouverner ton cœur à ces tendresses parentes de l'automne
auquel elles empruntent sa placide allure et son affable agonie.
L'œil est précoce à se plisser.
La souffrance connaît peu de mots.
Préfère te coucher sans fardeau ; tu rêveras du lendemain et ton lit te sera léger.
Tu rêveras que ta maison n'a plus de vitres.
Tu es impatient de t'unir au vent, au vent qui parcourt une année en une nuit.
D'autres chanteront l'incorporation mélodieuse, les chairs qui ne personnifient plus
que la sorcellerie du sablier.
Tu condamneras la gratitude qui se répète. Plus tard, on t'identifiera à quelque géant
désagrégé, seigneur de l'impossible.
Pourtant.
Tu n'as fait qu'augmenter le poids de ta nuit.
Tu es retourné à la pêche aux murailles, à la canicule sans été.
Tu es furieux contre ton amour au centre d'une entente qui s'affole.
Songe à la maison parfaite que tu ne verras jamais monter.
À quand la récolte de l'abîme ?
Mais tu as crevé les yeux du lion.
Tu crois voir passer la beauté au-dessus des lavandes noires…
Qu'est-ce qui t'a hissé une fois encore, un peu plus haut, sans te convaincre ?
Il n'y a pas de siège pur.
Le poème pulvérisé

René Char, poeta francés 1907 - 1988. Perteneció a lo que se denomina segunda generación surrealista. Durante la ocupación de Francia por los alemanes, luchó en la resistencia y fue ahí donde aprendió, según sus propias palabras: “a amar ferozmente a sus semejantes” y fue gracias a esta experiencia clandestina, surgió su gran obra: “Páginas de Hypnos”.
Obra: Cloches sur le coeur, (1928), Con André Breton y Paul Éluard, Ralentir: travaux (1930),  Le marteau sans maître (1934), Afuera la noche es gobernada (1938), Solos permanecen (1945), Feuillets d'Hypnos (1946), Furor y Misterio comprende su poesía completa entre 1938 y 1947, Los Matinales (1950), Art bref (1950), El sol de las aguas (1951), Búsqueda de la base y de la cima (1955), Lettera amorosa (1953), Retour amont (1966), Sans grand'peine (1973), Chants de la Balandrane (1977), Común Presencia (1964), Vuelta atrás (1966), La noche talismánica (1972), Aromas cazadores (1975), Obras completas (1983).
Más poemas de Renén Char en  A media voz

jueves, 27 de septiembre de 2012

Carolina Escobar Sartí, poesía


*Cannon Bernáldez – serie miedos


en su Día Especial

a los 140 millones de mujeres mutiladas

La noche ocre ceremonial
fue del viento que cortaba
cristales cuchillos  latas  piedras afiladas
(hipocresía hoy cortada
en higiénicos hospitales)
el rito a la sombra de
la palabra mentirosa del padre
la segunda mentira de la madre

las vecinas le agarraron los brazos la tía y la prima le abrieron las piernas manos en tobillos - cadenas- la vulva abierta calor de pecho a frente hoja fría en botón ardor incendio en el vientre el cuchillo en la respiración ardiente filo en el labio derecho

                              Grito mutilado
(no hay que deshonrar a la familia)

historia de un desvanecimiento
terco ardor en el labio izquierdo una espina bordando el diminuto agujero por donde entrará el hombre
y saldrán la orina  la sangre  los hijos
historia de un dolor

la madre le dijo anoche
que no tomara agua
las otras mujeres hoy
que todo fue por su bien
(el afortunado esposo poseerá
de por vida una castidad tallada
en carne viva)

Somalia Egipto Omán Pakistán
Eritrea Yibuti Etiopía India Yemén
Sudán Sierra Leona Burkina Faso
Mali Indonesia Malasia Bahrein
Emiratos Árabes
territorios cicatrizados
habitado corpus de mujeres
de ojos negros mutilados
condenados
a vestir el dolor de colores encendidos.


graffiti mujer

media noche y
los cuerpos del orden
tras mis talones urbanos
dentro del abrigo mi cuerpo
dentro del cuerpo la pintura
mi poesía nueva
diáspora en paredes ajenas
incisión en el tiempo
signo insurrecto del aerosol

es mía la ciudad
Hoy.

“Debajo del asfalto
está la tierra”.

Mañana
lo pintarán de blanco
pero las paredes blancas
no hablan
regresaré
vengo del gueto sin sueño
de la tribu que cifra el viento
mi rúbrica está
está mi cuerpo.

(Patria mi cuerpo: Historia de una mujer desnuda, 2009)

Carolina Escobar Sartí, leyendo: Te devuelvo las llaves  

Fragmento de: Te devuelvo las llaves
* * *
En estas horas de agonía
te devuelvo las llaves
de la puerta
las del mutuo pasado
y del incurable porvenir.
Invoco a todos mis muertos
nuestros muertos
lo que se nos muere
y los ojos buscan más allá de la pared
más allá de la ventana y la nube
en ayuno de latidos y amaneceres
por si puedo detener el minuto siguiente
la herida, la sangre
su dolor.

-----------------------
Nos detuvimos
vos y yo
frente al perro moribundo
nos encontramos
dando vueltas a su alrededor
buscando aire en el cuerpo.
Tan parecido lo que se muere.

La respiración huye en silencio
lentamente por donde
algún día se coló el olor de lo nuestro
olfato de perro perdiguero
que agoniza.

Abre un ojo y se muere
el cansancio saca la lengua
y se muere
los siglos se mueren
esto se muere.

------------------------
Anochece en las horas que mueren
anochecemos
nuestro mar descubre monstruosas criaturas
hunde barcos
hace aparecer islas.

Asistimos a nuestro naufragio.

Te vas al anochecer
por eso no duermo desde hace un siglo.
--------------------------

No pondría entre nosotros
una espada.

Nos hemos guardado
el dolor de los años
sin decirnos nada
nos hemos negado
la verdad.

Ha sido sólo el miedo
mío de la soledad
tuyo de la muerte
un mismo miedo.

En una noche
en un instante de claridad
cualquiera levantaría
la espada
y decidiría cobrarse
la vida
que nos robamos.

--------------------------
…..y aunque ya no te ame
te amaré para siempre.

Me iré por allí
escalando por las pendientes
de otras vidas
y sentiré vértigo cuando
vea el tamaño
de lo que dejamos atrás

……y aunque ya no te ame
te amaré para siempre.

Llevaré un lazo
amarrado a la cintura
para no caerme
aunque me caiga
las horas nuestras
las que se fueron
las puse ya en mi espalda
para el viaje
y empacaré alimento
para no tener toda
esta hambre de ti

……y aunque ya no te ame
te amaré para siempre.

----------------------------

Amanezco
(sin vos)
en el país que duerme.
Amanecieron antes mi abuela y mi padre
en este lugar donde
el imbécil sigue siendo
imbécil
y el ladrón, ladrón.
Mi abuela y mi padre están muertos.
Mi país también.
-----------------------------------
Apenas mayo
y hay ave que promete
su canto.

Estoy de vuelta
en el inicio del mundo
como cuando la tierra era roja
y el cielo comenzaba a ser ventana.

En la mitad del mes de la buena diosa
he devuelto todas las llaves
y desconocido sus cerraduras
(mis ojos en el fondo del océano transparente
recorren asombrados la ruta de la seda
cuando las ideas viajaban en camello
y el amor no era un concepto)
hoy
sólo existe el primer canto
del ave desnuda
que se ha atrevido – suicida-
a fermentar el aire
de los siglos.
Apenas mayo
y el océano se derrama en su gota.
Todos los siglos.
Estoy de rodillas
en el umbral de fronteras porosas
y es apenas un mayo
es apenas un nido
es apenas un ave
y todas sus alas.

(Te devuelvo las llaves, 2010)

Biografía
Carolina Escobar Sartí, Guatemala 1960. Poeta, escritora, columnista de prensa, investigadora social y catedrática universitaria.
Ha publicado los siguientes libros de poesía: Rasgar el Silencio (Editorial Palo de Hormigo -2003), Palabras Sonámbulas (Ediciones CES-2000), La Penúltima Luz (Ediciones del Pensativo – 1999), No somos poetas (F y G Editores – 2006), Patria mi cuerpo: Historia de una mujer desnuda, 2009, Te devuelvo las Llaves (F y G Editores - 2010

Fuente: Revista Prometeo
* FotoCannon Bernáldez

lunes, 24 de septiembre de 2012

Mariel Manrique, poesía

*Martin Stranka - on the edge


IX

A este banco del parque
he venido a buscarte cada día.
Desde que el sol duplicó
los árboles
hasta que la nieve
tomó posesión de mis arterias.
No era un gorro de lana
ni unas botas de piel
lo que necesitaba.
Yo te esperaba,
yo quería hacerte compañía.
Hizo frío cuando fue verano
y apoyaba las manos impacientes
sobre el arco impar de mis rodillas.
No quería olvidar tus formas.
No sabía quitar de mi memoria
tu arrasadora y tierna enfermedad.
Yo quería llevarte conmigo
a todas partes.
Y no dejarte era parar e insistir,
ahuecarme y decidir quedarme,
ahí, donde estuvieras.
No tenerme piedad.

Al oído te escuché susurrar:
"no es así, no está bien".
¿Pero qué estaba bien
en esos años
en los que fuimos tres?
Una chica amarrada
por el arsénico de la melancolía
a la sombra tristísima
de un hombre
que no quiere perder.

Te hablé, te hablé.
Nombré para alcanzarte
todo lo que veía.
En el banco tallé
la geografía lejana de tu nombre
para que vieras que te pertenecían.
La chica sobre el banco,
las figuras de viento,
el círculo de nieve
que empezaba a caer.

Yo no pude salir del círculo.
No cabían más hijos.
No podían gestarse
sin juguetes.
No cabían juguetes.
Mis muñecas de trapo
se blindaban los ojos
para no contemplar ese desastre
en el que puede convertirse
mi deseo
cuando se queda ciego,
cuando se obstina y no puede
ni siquiera llorar.
Yo quise ser tu parque.
Pero un parque es un parque,
no una chica que lleva
una venda invisible
oprimiendo hasta el córtex
su cabeza.

No veía nada que no fueran
tus camisas a cuadros.
No veía nada que no fueran
tus poquitas cosas.
Me sacaron del banco
los guardianes;
era tarde pero no del todo,
yo pisaba tu noche, la hacía mía,
cuando me pusieron a dormir.

"No vuelvas a hacerlo",
me tatuaste en la nuca.
Guardo en el bolso
la venda
que mi obstinación
volvió real.
Cuando amanezca
iré otra vez al parque,
me prometo.
Me prometo a mí misma.
A enterrar la venda
bajo el banco,
a sentir cómo entibia la madera
las rarísimas floreces que aparecen
en la autopista de mi cicatriz.

De: Mi vida en América

XIII
El patito feo no deviene cisne después del invierno.
Luego del ala esquiva y avergonzada de la madre,
el previsible maltrato del hermano,
la mueca de desprecio del granjero.
Luego del vía crucis del apartamiento,
no hay un cisne reflejado en el lago.

La ruptura imprevista de un séptimo huevo
arrojó al mundo a un cándido exiliado.
Lo esperan las balas de los cazadores,
las agujas impasibles del hielo.
Lo quieren para metérselo en la boca,
para que satisfaga, deshecho, el paladar.
Su nieve no es la nieve de las fábulas.
Es la nieve que asedia
la nuca inerme de los solitarios.

Pero el patito feo ni se entera.
Avanza con su vestido de satén,
sus guantes hasta el codo, su cigarro.
Sus labios formidablemente vivos.
Su risa sin preámbulos.
La diadema de su monarquía singular,
audaz y estrepitosa.
Todos los cisnes se parecen.
Cada patito feo funda su hermosura.


De: EL GABINETE DE MARY SHELLEY

IX
Ella mira conmigo

No fue esto lo que nos prometieron.
He arrojado mi red en tus ojos.
Su brillo es una forma delicada de llorar.
Estamos solos y te veo a través del agua.
Tus movimientos escriben la historia del mundo.

La red se agita imperceptiblemente,
hay un discreto eclipse,
un tembloroso punto de contacto,
en el que hago mío tu uniforme blanco
y se esfuman las líneas divisorias.
Si pudiera extender
esta señal de reconocimiento.
Si pudiera quedarme a vivir
en su evidencia.

Pero giramos la cabeza y regresamos
a nuestras patrias irreconciliables.
La red se pliega y se vacía bajo mis pestañas.
Fuera de la cafetería llueve agua de otra fuente.
Hace siglos que llueve, siglos que,
desde cada diminuta extranjería,
hacemos llover.


De: EL GABINETE DE MARY SHELLEY


MARIEL MANRIQUE LEE "B-SIDE & RARITIES" (POEMA INCLUIDO EN "LA CONSTELACIÓN DE ANDRÓMEDA") EN LA LIBRERÍA CRACK-UP, EL 17 DE ABRIL DE 2009. IMÁGENES: CINDY SHERMAN. MÚSICA: DIAMANDA GALAS / SIOUXSIE SIOUX.


He elegido tres poemas de Mariel Manrique, estos poemas pertenecen a su blog pajarodechina.blogspot.com.es
La elección ha sido difícil,  sus poemas tienen fuerza,  me arrastran por abismos insospechados, me desbordan, me conmueven. Leerla es como abrir ese cajón que de alguna manera he decidido ocultar, para hacerlo invisible y que no duela. 
Sin embargo, la leo, la releo y destapo ese cajón que me espanta pero, al mismo tiempo, me permite seguir, simplemente estando VIVA. 





jueves, 20 de septiembre de 2012

Mis poemas: Reflejo


Foto de Dora Mar

Reflejo

Soy un suspiro
un abrir y chocar
de pestañas
un furor de palabras
mi orilla
una sombra amarilla que gruñe
una fisura
naufragando en la noche.

Mis poemas: María Germaná Matta
Safe Creative #1209202373977